La suplementación con vitamina D puede mejorar la respuesta del paciente al tratamiento del eczema severo, según un nuevo estudio en el que participaron 92 niños y adolescentes.
La dermatitis atópica (DA), también conocida como eczema, es una condición que hace que la piel se enrojezca y pique, pero su patología no está del todo clara. Se cree que implica una interacción compleja de disfunciones de la respuesta inmune, factores genéticos y ambientales. Los tratamientos convencionales para la DA incluyen agentes inmunomoduladores, como esteroides tópicos y orales e inhibidores tópicos de la calcineurina, pero existe un interés creciente en el posible papel de la deficiencia de vitamina D en el desarrollo del eccema.
El eczema grave a estudio
Un metaanálisis reciente de estudios de intervención documentó que la suplementación con vitamina D se vinculó con una reducción clínicamente relevante en la gravedad de la enfermedad de DA, tanto en pacientes adultos como pediátricos.
El ensayo clínico actual, doble ciego, aleatorizado, paralelo y controlado con placebo es el primero en investigar los posibles beneficios de la suplementación con vitamina D en niños y adolescentes con eczema grave. Por lo tanto, el objetivo principal de este ensayo fue determinar el impacto de los suplementos a base de vitamina D junto con el tratamiento estándar en la DA grave.
El presente estudio, que involucró a 92 participantes con eczema grave, concluye que un suplemento diario de vitamina D por vía oral podría proporcionar una mejoría clínica en estos niños.
El uso de la vitamina D durante el metaanálisis
Los sujetos, con edades comprendidas entre 5 y 16 años, se inscribieron en el Instituto Nacional de Investigación en Hepatología y Medicina Tropical (NHTMRI) de El Cairo, Egipto. Esto ocurrió en el período del 6 de junio al 1 de septiembre de 2018. Concretamente, los participantes fueron asignados en una proporción 1:1 para recibir vitamina D3 1600 UI al día o placebo, más la terapia inicial de crema tópica de hidrocortisona al 1% dos veces al día durante tres meses.
Se obtuvo un historial dietético al ingresar al estudio, prestando especial atención a las fuentes potenciales de vitamina D. Cabe destacar que no hubo diferencias significativas entre los grupos, ya que las dietas se mantuvieron estables durante el estudio. Además, antes de comenzar a tomar la vitamina o el placebo, se recopilaron datos demográficos de los pacientes, análisis de laboratorio y características clínicas.
Los datos resultantes indican que, al inicio del estudio, no hubo diferencias significativas entre los dos grupos en el nivel sérico de 25 (OH) D y fue notable la alta prevalencia de deficiencia de 25 (OH) D. Por el contrario, al final del estudio, el cambio porcentual medio desde el inicio en la puntuación EASI fue significativamente mayor con el grupo de vitamina D (56,44%) que con el grupo de placebo (42,09%) (p = 0,039).
Vitamina D y placebo
De cara a los resultados, una proporción comparable en el grupo de vitamina D y el grupo de placebo (52,2% frente al 59,5%) experimentó una respuesta moderada al tratamiento (EASI <50). Por el contrario, se observaron patrones diferentes entre los pacientes suplementados y los asignados al grupo placebo en cuanto al porcentaje de pacientes que alcanzaron EASI 50 o EASI 75. En particular, el 38,6% de los pacientes suplementados alcanzaron EASI 75 frente al escueto 7,1% de los pacientes del grupo placebo.
Una limitación del estudio es que los pacientes tenían una diversidad étnica limitada, lo que potencialmente restringía su generalización, así como la falta de datos de otros dominios, como los datos facilitados por los pacientes. Además, dadas las posibles fluctuaciones estacionales que caracterizan al eccema, se necesitan ensayos futuros para determinar si los beneficios de la suplementación se mantendrían en los pacientes con DA grave relacionado con el invierno.
Antecedentes del estudio
De acuerdo con los resultados del presente estudio, se ha encontrado que el suplemento oral compuesto por vitamina D redujo la colonización de la piel por S. aureus, demostrando una mejoría clínica en niños con eccema moderado. De esta forma, se ha demostrado que la suplementación con vitamina D oral mejora los síntomas de DA relacionados con el invierno.
Por último, la mejora observada en la gravedad de la enfermedad a partir de la suplementación con vitamina D tiene una gran plausibilidad biológica, ya que la 1,25 (OH) D contribuye a las características distintivas del eccema. Destacan su función de barrera alterada, desregulación inmunitaria y defensa bacteriana inadecuada. Esto podría explicar el impacto positivo de la suplementación registrado en el presente estudio.
Referencias
Mansour NO, Mohamed AA, Hussein M, Eldemiry E, Daifalla A, Hassanin S, Nassar N, Ghaith D, Mohamed Salah E. The impact of vitamin D supplementation as an adjuvant therapy on clinical outcomes in patients with severe atopic dermatitis: A randomized controlled trial. Pharmacol Res Perspect. 2020 Dec;8(6):e00679.